En los albores de
un nuevo siglo, toda sociedad debería plantearse algunas preguntas.
¿Es ésta suficientemente integradora? ¿Está
en ella excluida la discriminación? ¿Son sus normas de comportamiento
conformes con los principios consagrados en la
Declaración
Universal de los Derechos Humanos?.
Los preparativos para la
Conferencia
Mundial de las Naciones Unidas contra el Racismo, la Discriminación
Racial, la Xenofobia y otras Formas Conexas de Intolerancia, que se celebrará
en Sudáfrica en septiembre de 2001, ofrecen la oportunidad para
valorar hasta donde hemos llegado a realizar las aspiraciones de los tres
Decenios de las Naciones Unidas contra el racismo. Los horrores del racismo
- desde la esclavitud al holocausto, del apartheid a la limpieza étnica
- han infligido profundas heridas en las víctimas y degradado al
perpetrador. Estos horrores permanecen aún entre nosotros bajo diversas
formas. Es hora de enfrentarlos y tomar las medidas adecuadas en contra
de ellos.